28 de febrero de 2014

Garceta grande

La Garceta grande (Ardea alba) se parece a la Garceta común, pero es notablemente mayor y, fuera de la época de cría, tiene el pico amarillo y las patas negruzco amarillentas, incluyendo los pies. Durante la época reproductora tiene el pico negro y las patas amarillas. En la península Ibérica es un ave migrante e invernante muy escasa, más frecuente en invierno y en el paso prenupcial, aunque en el Delta del Ebro (Tarragona) se la considera un invernante regular, pero muy escaso. En Cantabria es es un migrante e invernante accidental, con sólo dos citas publicadas, una en las marismas de Santoña y otra de 2 aves el 8 de mayo de 1993 en las marismas de Parayas, bahía de Santander En las Marismas de Santoña solo una única cita publicada de un ave el 1 de diciembre de 1988.
(Extracto de mi libro "Aves marinas y acuáticas de las marismas de Santoña, Victoria, Joyel y otros humedales de Cantabria", editado en Santander en el año 2000 por la Fundación Marcelino Botín).
Sufrió un gran declive entre finales del siglo XIX y primeras décadas del XX debido a que eran capturadas para el aprovechamiento de sus plumas nupciales como ornamento. Desde su protección a mediados del siglo pasado se encuentra en franca recuperación. El 90% de su población europea, estimada en 14.000-19.000 parejas en el año 2000, se encuentra en Rusia, Ucrania y Hungría, donde su población aumentó más de un 20% en el periodo 1970-1990. En el año 1997 nidificó por primera vez en España, en el Delta del Ebro más en concreto, y al año siguiente en Doñana. En el trienio 2008-2010 se censaron un total de 925-1.011 individuos invernantes cada año, casi la mitad de ellos en el Delta del Ebro. Tomé estas fotografías el 26 de enero de 2014 en Montehano, Marismas de Santoña.
Hasta el año 2000 en las Marismas de Santoña solo se contaba con una única cita publicada de un ave el 1 de diciembre de 1988. Según el Anuario Ornitológico de Cantabria, de mi amigo Máximo Sánchez Cobo, aquí ha invernado anualmente uno o, más raramente, dos individuos desde que comenzó a recoger citas dicho anuario, en el invierno 2007-2008, hasta este mismo invierno, el 2013-2014. El récord de individuos corresponde a una observación de 10 aves de mi amigo Alejandro García Herrera el 21 de septiembre de 2011, en el paso postnupcial. En esta fotografía vemos un ejemplar junto a dos espátulas comunes (Platalea leucorodia) y un cormorán grande (Phalacrocorax carbo), otras dos especies cuyas poblaciones han aumentado en las últimas décadas.
La Garceta grande, además de por su pico anaranjado, destaca por su tamaño, bastante mayor que el de la Espátula común o la Garceta común (Egretta garzetta), también en aumento.
Resultados del censo de aves acuáticas y marinas en el mes de enero en las Marismas de Santoña. Fuente de los datos: Sociedad Española de Ornitología.
Resultados del censo de aves acuáticas y marinas en el año 2018 en el Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel. Fuente de los datos: Sociedad Española de Ornitología y Gobierno de Cantabria.

1 comentario:

Ignacio Gámez dijo...

Si en la Cornisa Cantábrica la Garceta Grande ha ido en aumento, nada comparable a lo que ocurre en el valle del Ebro. Al menos en el cauce de este río a su paso por La Rioja y Navarra actualmente la población está muy próxima al 25-30 % de la de la Garza Real en invierno, en algunas localidades en esta época puede llegar a ser incluso más abundante, y fundamentalmente por la abundancia de especies invasoras como el Cangrejo Rojo, el Alburno o la Perca Sol
Saludos
Ignacio Gámez